En la etapa de la niñez y la adolescencia surgen de manera natural interrogantes relacionados con la ciencia, la tecnología, la innovación, el arte y la cultura (CTIAC), un deseo genuino por el aprendizaje basado en la experiencia y una curiosidad innata que propicia la construcción y aplicación del conocimiento desde edades tempranas en los contextos sociales en que se desenvuelven niños, niñas y jóvenes.
Lo anterior, refleja la necesidad de potenciar la pedagogía de la pregunta, el diálogo de saberes y conocimientos, la reflexión crítica, la participación y la transformación de imaginarios y prácticas cotidianas (Minciencias, 2021) mediante la CTIAC, desde la primera infancia, pasando por la niñez y la adolescencia, como una valiosa oportunidad de intervención y transformación social.
A nivel nacional e internacional existen simultáneamente proyectos, programas y estrategias que buscan promover el fortalecimiento de una cultura científica en la población infantil, así como su capacidad de razonamiento, análisis y creación. Estos procesos requieren siempre la convergencia y participación activa y decidida de diversos actores (comunidades, investigadores, docentes, empresarios, tomadores de decisiones, etc.) que impulsen de manera integrada procesos de apropiación social de la ciencia, la tecnología e innovación (CTeI), el arte y la cultura para fomentar en niños, niñas y adolescentes un pensamiento crítico y creativo, despertar su interés por la pregunta y movilizarlos a desarrollar soluciones que contribuyan a la transformación de sus entornos y sus vidas per sé; estos procesos pueden ser promovidos desde las instituciones de educación superior que en el presente y en el futuro les abrirán las puertas de la formación y la transformación.
Hoy por hoy, la sociedad del conocimiento sigue planteando retos sobre la necesidad de reflexionar alrededor de la generación y uso del conocimiento (Pérez, et al, 2018) como un bien público, y sobre las amplias brechas que aún hoy existen para democratizarlo. Para cumplir dicho propósito, la apropiación social del conocimiento se configura como una apuesta que permite fomentar prácticas de diálogo, análisis, intercambio, reflexión y negociación alrededor de la gestión, producción y aplicación de la ciencia, la tecnología y la innovación bajo lineamientos de inclusión, confianza y equidad, con la participación de diversos actores sociales que comprenden sus realidades y generan mediaciones para transformarlas, lo que redunda en su bienestar social (Minciencias, 2021). Así pues, se entiende que los participantes no son receptores pasivos de conocimientos, sino por el contrario se convierten en sujetos sociales (Vergara, et al., 2015) activos, críticos, conexos que desde lógicas horizontales se relacionan con sus pares, docentes e investigadores en espacios de convergencia para pensar, argumentar, co-crear, aplicar la CTIAC en su cotidianidad a partir de las iniciativas presenciales o virtuales que permanentemente se gestan desde la academia o los entornos empresariales.
Según Corchuelo y Colciencias (2018) en el 2016 se evidenció un descenso de 9% en la generación de productos de Apropiación Social del Conocimiento registrados en la Plataforma ScienTI-Colombia, lo que llamó la atención a nivel país respecto a la baja participación de la ciudadanía y el involucramiento de grupos en actividades de interacción con ciudadanos para la resolución de temas de interés común. Este mismo estudio destacó que Santander, se ubica junto con Bogotá, Antioquia y Valle del Cauca, entre los departamentos con más reportes de productos en esta materia. El reto está en lograr que los procesos de apropiación realmente logren fomentar no solo el conocimiento y la comprensión de la ciencia, sino también la aplicación y réplica de la misma en las vidas cotidianas de las personas.
Para Minciencias (2021) es una prioridad hacer práctica la apropiación social en múltiples formas en aras de lograr que la población tenga un mayor y mejor acercamiento, entendimiento y uso de la ciencia, desde el fomento de vocaciones científicas de niños, niñas, adolescentes y jóvenes hasta la expansión de proyectos de mayor envergadura que requieran la participación activa y sostenible de dicha población.
No obstante, usualmente, en el marco de procesos académicos, de investigación o extensión social, las IES (Instituciones de Educación Superior) o empresas desarrollan iniciativas en las que la niñez y la adolescencia son protagonistas, lideradas normalmente por la díada (estudiantes-docentes) o la tríada (instituciones-estudiantes-docentes), adscritos a los diferentes programas de ciencias sociales, humanidades y artes, ciencias de la salud, ciencias económicas, administrativas y contables, ingenierías, etc. con los que cuentan las universidades o los departamentos de gestión humana en el ámbito empresarial. Estas iniciativas se desarrollan generalmente de manera disciplinar, soslayando las potencialidades del trabajo articulado y transdiciplinar.
La duplicación de esfuerzos en iniciativas análogas concebidas desde programas de distintivas facultades, la falta de dominio en metodologías lúdico-pedagógicas para ejecutar actividades con la población infantil o adolescente; la carencia de un componente transversal concreto de apropiación social del conocimiento en todas las iniciativas que permita dar prioridad al reconocimiento del contexto, la participación, el diálogo de saberes, entre otros principios de la apropiación (Minciencias, 2021), son factores que motivan la construcción de un programa como Ukids Unab, que en esencia, pretende explorar, reconocer, sistematizar y potenciar las estrategias y programas desarrollados con niños, niñas y adolescentes a partir de dos componentes claves: 1) La puesta en común de Respuestas científicas a preguntas cotidianas para fomentar el pensamiento activo, creativo y crítico de la población participante, y 2. La creación de Soluciones científicas a problemas cotidianos en aras de promover espacios de práctica que articulen el potencial de la CTIAC para dar respuesta a desafíos que se generen en las cotidianidades de los participantes y que puedan estar articulados con las metas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (Naciones Unidas, 2018) planteadas a nivel mundial en materia de educación, salud, género, etc. para impactar a la población en sus diferentes territorios.
Como antecedentes a esta propuesta, el proyecto educativo institucional de la UNAB menciona el enfoque social cognitivo sustentado por Vygotsky, como fundamento pedagógico y en consecuencia plantea que “… los aprendizajes deben ser significativos y de permanente reflexión, comprensión y construcción de sentido” (PEI, 2012.P.25), en diálogo con el pensamiento de Freire: “Aprender replanteando críticamente las palabras del entorno, un entorno subalterno. Esto le permite al ser humano redescubrirse como sujeto instaurador de su experiencia, distanciándose de su mundo vivido, problematizándolo y decodificándolo críticamente”. (Martínez R, Rondón G & otros. 2018. P. 15). En consonancia con lo anterior la universidad desarrolla estrategias y programas con la participación de población infantil y juvenil en torno a diversas áreas de conocimiento.
Desde la Clínica FOSCAL, igualmente se gestan iniciativas dirigidas a niños, niñas y adolescentes que buscan impactar positivamente el bienestar de los trabajadores y sus familias. Dichas iniciativas se gestionan periódicamente con cajas de compensación, instituciones particulares o universidades para ofrecer distintas alternativas formativas, de ocio y sano esparcimiento relacionadas con la CTIAC.
Una iniciativa como la de UNAB KIDS, abre un abanico de posibilidades para reconocer, explorar, sistematizar y co-crear estrategias lúdico-pedagógicas que fomenten el interés, la capacitación, la integración, la interlocución entre diversos actores sociales que generan, intercambian, utilizan y valoran el conocimiento derivado de CTeI para la sociedad. Con esta propuesta se apuesta al fomento de un diálogo de saberes permanente, al intercambio de conocimientos y a la generación de preguntas-respuestas y soluciones que redunden en el bienestar y la transformación social de las comunidades participantes.
Para el desarrollo de este proyecto es de vital importancia dar apertura a escenarios que permitan interacciones mediadas por la cultura, el arte, la CTel, que lleven a procesos de aprendizaje contextualizados y transferibles; abiertos a la sociedad, que permitan a los niños, niñas y adolescentes de diferentes comunidades tener una participación más activa en iniciativas articuladas con componentes de apropiación social del conocimiento, impactando significativamente a las nuevas generaciones.
En consonancia con lo anterior, la propuesta plantea la siguiente pregunta objeto de estudio: ¿Cómo generar un programa multicomponente que fomente la apropiación social de la ciencia, la tecnología, la innovación, el arte y la cultura en niños, niñas y adolescentes vinculados a programas sociales de UNAB y FOSCAL, mediante la implementación de metodologías lúdico-pedagógicas orientadas hacia la transformación social de imaginarios y prácticas relacionadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible?